28 de Abril...y un poco de Guara despues: Peña Aman y Pico del Aguila

Con  las decisiones tomadas, vuelvo a la Sierra Norte , parando en Guara para conocer un par de sitios  que todavía no había podido visitar.

 La primera es Peña Aman , el pico menos visitado de los dos que forman el impecable tajo del Salto de Roldán sobre el río Flumen.  Cumbre gemela de su hermana , la  Peña de San Miguel, aunque 1 metro más alta según la cartografía de la que dispongo (1124 m).

Es una cumbre singular, en una zona bastante salvaje y sin mucha actividad humana, lo que hace que toda la excursión sea solitaria y de cierto "compromiso" si se va sol@. No conviene realizarla si no se tiene clara la meteo  , un paso seguro en la zona cimera y un cierto conocimiento de la zona; a su favor tiene que es corta (muy corta, diría yo) y rápida, se puede hacer prácticamente en sus tres cuartas partes corriendo. Un lugar para entrenar inmejorable.

Se parte de un parking casi paralelo al que se usa para  hacer San Martín de la Val d'Onsera. Un poco antes del barrio principal de San Julián de Banzo, desviarse a derecha como si fuéramos al parking para hacer el barranco, pero inmediatamente tomar desvío a izquierda, siguiendo los carteles (año 2011)  que indican Salto de Roldán y Peña Amán.

Una vez dejado el vehículo, tomar senda evidente que primero se dirige en claro descenso a cruzar el propio cauce de San Martín . Luego continua nítida y marcada  con suaves ascensos y leves descensos - muy adecuada para corretear en su mayor parte-  y remonta por ladera despejada de árboles, con la cumbre a la vista. A la derecha del todo queda la zona de resaltes que aloja el barranco de Lenases.

Se avanza rápido y se cruza una zona de losas y resaltes rocosos en las cercanías de una cauce seco. Antes  de darnos cuenta estamos en un collado, colgado sobre el río Flumen al pie del resalte final de Peña Amán y con una perfecta visión de la Peña San Miguel, al otro lado del Salto. Desde este collado es posible seguir hacia la Peña del Mediodía y también bajar al encuentro del Flumen por una traza bastante empinada. Magnifica vista.

Se afronta el resalte cimero, primero por senda cortada por algún resalte rocoso pero sin ningún tipo de dificultad. Después, la traza  acaba colgándose sobre una especie de repisa, bastante área pero sin dificultad, con una increíble vista sobre el Flumen y el paredón de la Peña San Miguel (por cierto: ¿por ahí va una vía Picazo?) . Avanzar por esa cornisa hasta que te topas con las clavijas finales, 4 ó 5. Helas aquí , ellas, sin más:

La trepada es algo  área pero muy fácil, se puede prescindir de las viejas clavijas si se tiene hábito en la escalada. Se llega así a una cumbre preciosa, con "aire por todos los lados" , estrecha  aunque con espacio de sobra para tomar una barrita y una lata de cerve,  hacer fotos y escuchar tranquilamente el repertorio de sonidos que ofrece el lugar: el viento propio de una cima aislada, el sonido  de las aguas del Flumén metros antes de adentrarse en las míticas Palomeras y el batir de las alas de las decenas de buitres que merodean por un cielo azul intenso. Un día repleto de luz propia.

La cima

En media hora estoy de vuelta en el coche y rápidamente me desplazo a Arguís  para conocer el otro monte al que ya subí una vez en bici con Günther un frío día de Enero: el Pico del Aguila, otro mirador sobre el Pirineo y el valle de Belsue  y Cienfuens.

El camino que deseo recorrer parte de las cercanías de la cerrada Hospedería de Arguis: si vienes desde Huesca, tomar desvío al pueblo de Arguis. Justo antes de pasar por debajo la carretera nueva  de Monrepós , buscar el indicador de la ruta a la derecha, entre los árboles.    

Es una camino cómodo , perfectamente trazado ,  apto para todos los públicos....y  también para la BTT (que es por lo que he ido: ver si se puede bajar en bici enteramente). Cuando se toma altura,  además de la panorámica y estimulante  vista sobre el embalse de Arguis y el valle de Garona (Rasal)

se cruza una zona pedregosa y cambia la vertiente poco a poco, adentrándose el camino por un vallejo un tanto escondido. La vegetación cambia y  andar es fácil y muy cómodo: otro lugar para corretear por el monte...jeje... 

Tras recorrer un auténtico túnel de árboles y luego bojs, se desemboca discretamente en la carretera de acceso a las antenas y cumbre de esta montaña  (lástima que estén ahí...). 1623 metros. Aquí tienes buena información de esta y otras rutas en esta zona del prepirineo oscense.

Subir aquí te da el privilegio de ver el valle de Belsué con las primeras nubes del cambio de tiempo que se avecina.

Y una  inusual perspectiva del embalse Arguis, Peña Gratal y las zonas de escalada del Valle de Garona (Rasal).

Bajo rápido, imaginando este descenso con la bici. 


420 kilómetros después entro en casa: hace frío en la Sierra Norte de Madrid.