Tras unas cuenatas esquiadas en Gredos, aprovechando las nevadas de SW de las últimas semanas , la Meteo del infalible Jorge García da bueno, y esto, en lenguaje empujando, quiere decir "Pirineos". Asi que visto y no visto,una parte del TST de Empujando se coloca en línea con la A-2 y en un pispas estamos en Aisa, tras el correspondiente bocata en Jaca.
¿Por qué escogemos el Pico de la Garganta de Borau o Lecherines? Pues porque es una montaña estética, con buen ambiente de montaña una vez que encaras la subida al Collado de Lecherines. Los espolones y paredes que cierran los márgenes del valle le confieren caracter y la visión de los Mallos de Lecherín, de asepcto inexpugnable y vertical, nos hace pensar más en determinadas zonas de Dolomitas que en nuestro
familiar Pirineo aragonés. La llegada a la cumbre tiene pinta de ser alpina y seguro que le da un punto de belleza, que al final es lo que buscamos, ¿no?. Además, es una de las pocas montañas que personalmente me quedan por ascender en la zona ,excepto el Llana (o Llena,o Liena , de todas estas formas lo he visto escrito) de la Garganta , que tambien me parece un montañón. Para colmo, Antuán no conoce este valle, asi que la cosa ofrece pocas dudas.
Llegamos al plató previo al collado y la nieve cambia de calidad de forma brusca: se nota de manera nítida la cota de nieve en días anteriores, que debió rondar los 2200 y, claro, a la nieve reciente no le ha dado tiempo a transformar. Resultado: sobre una capa de nieve muy dura, una costra que quita el hipo... y la moral, porque es de esas costras-costras que sirven como ejemplo para definir lo que venimos conociendo como "un asco" (por no ir a mayores....). El esquí parece que aguanta, pero justo cuando cambias el peso para el deslizamiento del otro...zas, se hunde como el Titanic, sin remisión,sin transición, sin alivio posible, sin.....vergüenza. Total: que es mejor levantar una pierna sola desde 30 cms por debajo que una pierna con unos zapatos de 163 cms.: Me quito los esquís sabiendo lo que me espera.
Comienza el calvario. Antuan viene detrás y comenzamos a superar la pala final de acceso al collado haciendo zetas. Ponemos al día el inventario de palabrotas y maldiciones, yo en especial que voy abriendo huella. Mirando al plató que dejamos abajo, aparecen dos alpinistas que dejan sabiamente los esquís y viendo nuestro penar , entran en la pala ligeramente más hacia el sol que nosotros.....Llegamos al collado.
Aprovechamos para beber agua,comer algo y ponernos los arneses: la bonita canal que nos llevará a la cima aparece sin huella y por si es el caso , decidimos subir un cordino para facilitar la bajada si hace falta. Nos pasan ahora los dos montañeros - vascos, por mas señas- que comienzan a progresar por la canal con nieve muy dura. Van bien, fuertes y bastante rápido, pero si les alcanzamos nos daremos relevos y podremos progresar mejor. Dicho y hecho: llegamos a su altura y comenzamos a relevarnos, profundizando la huella para garantizar una bajada sin problemas . El trabajo da como resultado una preciosa cima, con buen ambiente montañero y vistas infinitas. Que suerte: una cumbre nueva para mi, y la primera de Aisa para Antuan.
Los vascos comienzan el descenso y unos minutos después les seguimos nosotros. La pendiente es empinada, unos 45-50º ,
pero enseguida cede y ya a la vista del collado y los Mallos de Rigüelo vemos a bastante gente que llega a nuestro destino inmediato. Por suerte hemos sido los más madrugadores y cuando calzamos esquís comienza subir mucha gente por la canal . Demasiada.
Vamos a retornar al coche haciendo la ruta circular, para lo cual volcamos hacia el Sur, vista a los llanos de Gabardito (no confundir con el de Oza) .De hecho se adivina abajo el arranque del Barranco de Agüaré (o Añaza), que ya hemos descendido con Empujando este año.
La nieve se deja esquiar,está transformada aunque un poco enganchona.
Debemos descender con un ligero flanqueo a la derecha para así alcanzar el refugio Lopez Huici. Desde allí, al collado de la Magdalena. Una sabrosa canal con nieve muy, muy dura (orientación oeste pura) nos dejará en el cubilar del Rigüelo y minutos despues, en el camino de ascenso, muy cerca del embudo del Aspe. En esta canal me ciego, la disfruto esquiando e intento apurar tanto que al final me cuelgo sobre un salto vertical, además sin nieve. Este estrechamiento se puede evitar en margen izquierdo , saliendo por unas pendientes claras a las laderas del Pico de La Magdalena, o bien margen derecho de la canal, por una especie de rellano que deja en unas palas francas (con perdón) que te dejan en el mismo Cubilar (cabaña). Os dejo una fotillo: el estrechamiento es evidente, a la altura de los pinos , en esa especie de lomo que parte en dos el canalón que desciende del collado.
